Hace como 50 años se descubrió que mirases a donde mirases, en el cielo se detectaba una radiación de fondo de microondas. Esta radiación era uniforme, parecía que de todas partes provenía la misma.
Pensando un poco, llegaron a la conclusión de que esa radiación venía de cuando se formó el universo justo después del Big-Bang. Pero había un problema, y es que si era uniforme todo el universo debía estar entonces a la misma temperatura, y en esas condiciones era imposible que se hubieran formado galaxias ni nada de nada.
Pasó el tiempo, se afinaron los aparatos y se descubrió que en realidad esa radiación no era uniforme, sino que había pequeñísimas fluctuaciones.
Fueron esas pequeñas cosas, apenas imperceptibles en la normalidad de la radiación, las que habían hecho posible en su día que hoy haya un universo lleno de galaxias y cuerpos apasionantemente raros.
<<Seguro que tu vida "normal" está llena de infinitos matices que la hacen una vida apasionante>>.
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